¿Vale la pena reparar un ordenador portátil?
Tarde o temprano llega el día en que se estropea el portátil o empieza a ir lento y ya vemos que alguna cosa no va bien.
Normalmente hace una evolución gradual que irá a más. Nos estará fastidiando una buena temporada y cuando estemos hartos o ya sea insostenible decidiremos comprar un ordenador nuevo.
Pero, ¿quién ha dicho que no vale la pena arreglar el portátil?!
No hace tantos años, todo el mundo llevaba a reparar su ordenador a una tienda de informática.
Como en el zapatero, como cualquier pequeño electrodoméstico, las tiendas de informática tenían taller y arreglaban los ordenadores de mesa o los portátiles con la misma eficacia.
La bajada de precios de los nuevos equipos, y muy especialmente de los portátiles, ha hecho que en los últimos años los compradores prefieran cambiar un ordenador en lugar de arreglarlo.
Sustituir a un equipo cuando no es imprescindible acaba saliendo más caro a medio y largo plazo (por no hablar del derroche de recursos que va en contra de un planeta más sostenible).
La reparación de portátiles es más compleja que la de los ordenadores de sobremesa
El motivo principal por el que los ordenadores portátiles se estropean más que las torres es la falta de espacio.
Todo está milimetrado y comprimido y esto dificulta una ventilación òptima, básica por el buen funcionamiento de todos los componentes.
Tener el ordenador encendido sobre un mantel, almohadas o sábanas es de las peores cosas que puede hacer. Las limitadas aberturas de ventilación suelen quedar medio tapadas y la temperatura alta deteriorará, con el tiempo, las partes y conexiones internas.
Evite trabajar con el portátil sobre telas o tejidos.
Por otra parte, para abaratar costes y también para mejorar las conexiones entre los componentes informáticos, muchas partes internas de los ordenadores portátiles se montan soldadas en vez de atornilladas. El lado negativo de esta técnica es que puede imposibilitar la reparación del portátil, dependiendo del origen del conflicto, porque no es modular y, por tanto, no se puede desmontar.
Arreglar un ordenador portátil normalmente compensa.
Mi recomendación siempre es pedir opinión en el taller informático. “¿Merece la pena arreglarlo o es mejor cambiarlo por uno nuevo?”
Las dos reparaciones más habituales en portátiles son:
- Cambio de disco: Sabe que en un taller de informática le pueden sustituir el disco mecánico por uno sólido y tendrá un equipo que funcionará como si fuera nuevo.
- Sustitución de la batería: ¿Le han dicho que la batería del portátil, dado que ahora ya no son extraíbles, no se puede cambiar? Falso. ¡En un taller lo pueden hacer y tiene ordenador por días! Eso sí, intente evitar tenerla enchufada permanentemente, una de las principales causas de avería.
Y todavía un motivo más para confiar en un taller de informática: ¿Sabéis que a veces los virus informáticos atacan al funcionamiento del hardware? Es decir, afectan a los componentes físicos del ordenador y no es necesario desmontar nada. Basta con identificar el problema y ya tendrá medio problema resuelto.
Antes de pensar en cambiar de equipo es importante que alguien profesional le haga un diagnóstico y a partir de aquí podrá valorar las opciones con criterio y veracidad.
En la mayoría de casos le saldrá a cuenta reparar el portátil.
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